.. Y dejarte dormir un poco más y mientras darte besos en la espalda y acariciar tu piel y decirte cuanto me gusta tu pelo, tus ojos, tus labios, tu cuello, tu pecho, tu culo, tu cuerpo, y decirte estás precioso y abrazarte cuando estés ansioso y abrazarte más cuando sufras y desearte solo con olerte y saber que con vos estoy a salvo e intentar darte lo mejor porque vos lo merecés, y hacer el amor con vos a las tres de la madrugada y de alguna, de alguna, de alguna manera comunicarte algo de este amor arrasador abrumador e incondicional que libera la mente y enriquece el corazón.. este amor eterno y presente que siento por vos.
lunes, 8 de junio de 2009
Tiene los ojos cerrados. Está dormido. Está al lado mío y está dormido. Lo miro. No puedo dejar de mirarlo. Quiero darle un beso pero no quiero despertarlo porque está dormido y me encanta mirarlo. Yo no me quiero dormir. Quiero mirarlo de vuelta. Pero se mueve y me mira y se ríe. Me da un beso en la frente y me tapa. Me abraza y cierro los ojos. Yo también me quedé dormida.
Estoy tratando de decirte que me desespero de esperarte, que no salgo a buscarte porque sé que corro el riesgo de encontrarte, que me sigo mordiendo noche y día las uñas del rencor, que te sigo debiendo todavía una canción de amor.
HERMOSA
VERDAD ABSOLUTA
Una de las verdades de la lucha es la unión. Una de las características para que esa unión persista es el apoyo entre compañeros (de lucha, precisamente). Uno de los problemas de la realidad es la tortilla. En ese momento (digamos, cuando se invoca a la tortilla), la unión se disuelve, y por lo tanto la lucha pierde poder. Por ende, no hay cambio, o por lo menos no hay cambios deseados por todos los que alguna vez conformamos esa unión.
CASI CASI
REDISTRIBUCIÓN
Para mí lo que está mal es que unos pocos tienen mucho, muchos tienen poco y algunos no tienen nada. Si esos algunos que no tienen nada tuvieran algo de lo poco que tienen los muchos que tienen poco... Y si los muchos que tienen poco tuvieran un poco de lo mucho que tienen los pocos que tienen mucho, habría menos líos. Pero nadie hace mucho, por no decir nada, para mejorar poco algo tan simple.